Kosovo derrotó 1-0 a Israel, este domingo en el grupo I de la fase de clasificación a la Eurocopa-2024, en el que era el primer desplazamiento de la selección israelí de fútbol desde los ataques del 7 de octubre y el inicio de la guerra en Gaza.

La victoria kosovar se dio con un tanto en el minuto 41 de Milot Rashica, jugador del Besiktas turco.

En el grupo I, Israel es tercero con 11 puntos. Ve acercarse a Kosovo, cuarto con 10 unidades. Por delante están Rumanía (1º, 16 puntos) y Suiza (2º, 15 puntos).

Los israelíes tienen un partido disputado menos que rumanos y kosovares, y los mismos que los suizos.

El partido se celebró con altas medidas de seguridad en Pristana, capital de un país donde la gran mayoría de los 1,8 millones de habitantes son de religión musulmana, pero Kosovo es también un aliado muy cercano a Estados Unidos y mantiene buenas relaciones con Israel.

El partido de fútbol pudo transcurrir sin incidentes, con miles de espectadores en la grada y con protagonismo del deporte.

Para garantizar la seguridad se preparó un gran dispositivo en todos los alrededores del estadio, con presencia también de unidades especiales de la policía. El equipo israelí fue especialmente protegido durante su desplazamiento por la ciudad.

"Vemos escenas de niños (en Gaza) y nosotros mismos también tenemos la experiencia de la guerra", comentó a un periodista de la AFP uno de los espectadores del partido, Driton Ajeti, un abogado de 37 años. "Estamos en contra de lo que está ocurriendo, pero hoy hemos venido aquí por el deporte, todo lo demás se decide en otro lugar", apuntó.

"No hay que mezclarse con la política, solamente deporte", señaló Gezim Hasi, un camarero de 45 años.

Unas horas antes del partido, una gran bandera palestina con la inscripción "Free Palestine" (Palestina libre) fue desplegada en la fachada de un hotel del centro de Pristina por activistas feministas, antes de ser rápidamente retirada por la policía.

Unas 1.200 personas, sobre todo civiles, murieron según las autoridades israelíes en el ataque sin precedentes cometido por el movimiento islamista palestino de Hamás el 7 de octubre.

En la Franja de Gaza, los bombardeos israelíes han matado desde el 7 de octubre a 11.180 personas, mayoritariamente civiles, de ellos 4.609 niños, según Hamás.