El encuentro entre Marsella y Lyon fue suspendido luego de que el autobús que llevaba a los jugadores lioneses al Stade Vélodrome fuese apedreado por ultras marselleses y su entrenador, el italiano Fabio Grosso, herido, unos incidentes que empañaron la 10ª jornada de la Ligue 1, en la que el PSG se colocó segundo tras vencer 3-2 en Brest con doblete de Kylian Mbappé.

"Actos indignantes e inadmisibles", declaró a la AFP la ministra de Deportes Amélie Oudéa-Castéra tras ver las imágenes del autobús que transportaba a la expedición lionesa al Stade Vélodrome con varios cristales rotos tras haber sido atacado con proyectiles por ultras del Marsella.

En ese ataque, ocurrido unas dos horas antes del inicio previsto del encuentro, Grosso resultó herido en un ojo y sufre "vértigos" y traumatismos múltiples, según una fuente del club, por lo que fue trasladado a un hospital para ser sometido a exámenes médicos.

En imágenes ofrecidas por Prime Video, difusor de la Ligue 1 en Francia, se pudo ver a Grosso con la cara ensangrentada y después saliendo de la enfermería del Vélodrome con un vendaje en la cabeza.

En una fotografía que se ha viralizado en X (antes Twitter) se puede ver al entrenador tumbado en una camilla, vestido con el chándal del Lyon, con una brecha a la altura del ojo izquierdo.

Siete detenidos

Según fuentes policiales, una segunda persona que viajaba en el autobús resultó herida, el adjunto de Grosso, su compatriota Raffaele Longo.

La prefectura de policía de Marsella indicó que siete personas fueron detenidas, dos de ellas por lanzar objetos contra el autobús del Lyon.

Tras estos incidentes, el árbitro aplazó el encuentro luego de que el Lyon expresara su negativa a disputar el encuentro en esas circunstacias, confirmó a la AFP una fuente de la LFP, organizadora del campeonato. 

No obstante, el propietario del Lyon, el magnate estadounidense John Textor, se mostró "muy enfadado" por el ataque, pero aseguró que "todo el mundo quería jugar (...), incluso después del incidente. Todos queríamos jugar al fútbol esta noche".

El presidente del Marsella, el español Pablo Longoria, consideró los hechos ocurridos como "completamente inadmisibles".

Este partido entre dos históricos en crisis (Marsella es 9º y Lyon colista) echaba el cierre a una jornada en la que también hubo incidentes en Brest, donde jugó por la tarde el PSG.

La estrella parisina Kylian Mbappé se encaró con los ultras rivales tras anotar desde el punto de penal el gol del triunfo del PSG (3-2) y, lo hizo, al parecer, para defender a un compañero insultado por parte del público.

Según varios periodistas presentes en el estadio, así como una fuente del club de la capital, varios hinchas del Brest gritaron "violador" al jugador marroquí Achraf Hakimi, imputado en marzo por un supuesto caso de agresión sexual, e íntimo amigo de Mbappé.

Doblete y polémica

"Bah, por supuesto debería haber cantado con ellos cuando insultaron a mi compañero. Algunos no han puesto nunca un pie en una cancha, no importa el nivel...", reaccionó Mbappé en un mensaje publicado en X (antes Twitter), sin identificar al jugador insultado.

El entrenador del Brest, Eric Roy se mostró "un poco sorprendido" el comportamiento de Mbappé, que calificó de "ridículo".

Por otro lado, el colectivo contra la homofobia en el fútbol "Rouge direct" denunció a través de X cánticos homófobos por parte de los ultras del Brest hacia jugadores parisinos a final del partido, instando a las autoridades a actuar para evitar este tipo de incidentes.

Indicentes al margen, el sufrido triunfo del PSG, con doblete de Mbappé, colocan al vigente campeón en la segunda plaza de la clasificación con 21 puntos, a uno del nuevo líder, el Niza, único imbatido que queda ya en la Ligue 1, sumando seis victorias y cuatro empates en diez jornadas.

El Mónaco, líder antes de comenzar esta 10ª jornada, perdió su privilegiada posición al caer frente al Lille (4º), quedando en tercera posición con 20 puntos, solo dos más que su rival de este domingo.