Los partidos que enfrenten al Anderlecht y al Standard de Lieja se jugarán sin aficionados del equipo visitante hasta el final de la temporada 2024-2025 debido a los numerosos incidentes violentos en los últimos años, anunciaron este lunes los dos clubes más importantes del campeonato belga.

"En los últimos seis años, el 'Clásico' ha estado interrumpido en cuatro ocasiones", explicaron ambos clubes, a menudo objeto de sanciones por parte de la federación. En dos de estos cuatro choques, los partidos no se reanudaron.

El jueves, en los octavos de la Copa entre ambos equipos, el duelo estuvo interrumpido y los aficionados provocaron destrozos, arrancaron asientos y lanzaron bengalas.

"Lo que debería ser uno de los grandes momentos del fútbol belga es a menudo una desilusión para los aficionados del deporte en los últimos años", subrayaron los dos clubes, conscientes de "penalizar a aficionados que tienen las mejores intenciones".

"A pesar de las medidas de seguridad elaboradas, el Clásico se ha saldado con violentos enfrentamientos e importantes daños materiales", reconocieron ambos clubes, que quieren "enviar un mensaje importante: la violencia no tiene lugar ni dentro ni fuera de un estadio de fútbol".

Debido a los incidentes del jueves, la Federación Belga (RBFA) podría sancionar a ambos clubes, que podrían ser obligados a jugar a puerta cerrada.