El capitán de Inglaterra, Harry Kane, llegó el viernes a Múnich para someterse al reconocimiento médico previo a su muy probable fichaje por el Bayern, en una operación que superará los 100 millones de euros (110 millones de dólares), constató un fotógrafo de la AFP.
Kane aterrizó en el aeropuerto de Oberpfaffenhofen, en la periferia oeste de Múnich, alrededor de las 19h10 locales (17h10 GMT), y luego llegó poco antes de las 20h00 (18h00 GMT) al centro de la capital bávara, para someterse allí a un reconocimiento médico en una clínica.
El vuelo estaba inicialmente previsto por la mañana, pero se vio retrasado varias horas.
Según medios alemanes e ingleses, el Tottenham y el Bayern llegaron el jueves a un acuerdo para un traspaso por cuatro temporadas, hasta junio de 2027. El jugador dio su visto bueno a la operación en la noche del jueves.
Al coste del traspaso de 100 millones de euros se añadirían otros 10 millones de euros en bonificaciones. El salario de Kane en el Bayern, según la prensa alemana, sería de unos 25 millones de euros (27,3 millones de dólares).
"Según tengo entendido, está avanzado hasta el punto de que parece que va a ocurrir", declaró este viernes el entrenador del Tottenham, Ange Postecoglou, que consideró "inminente" el traspaso.
Con Kane, el Bayern parece encontrar al sustituto de Robert Lewandowski, que fue su atacante estrella y gran goleador durante ocho temporadas, hasta su salida el año pasado rumbo al FC Barcelona.
El inglés, que acaba de entrar en la treintena, llevaría en el Bayern el número 9, el que dejó libre Lewandowski y que nadie lució la pasada temporada.
La paradoja del 'Príncipe Harry'
En la pasada temporada, el Bayern se autoconvenció de que no necesitaba cubrir el gran hueco que dejaba libre Lewandowski, pero tuvo que rendirse a la evidencia. Las lesiones del camerunés Eric Maxim Choupo-Moting le ralentizaron en el final de temporada y estuvo a punto de no revalidar su corona en la Bundesliga.
Finalmente el Bayern pudo conquistar una undécima liga alemana seguida gracias a un gol en el minuto 89 de la última jornada, a finales de mayo, dejando al Borussia Dortmund con la miel en los labios.
Kane es el máximo goleador de la historia de la selección inglesa, desde su 54º tanto -uno más que Wayne Rooney-, logrado el 23 de marzo en Nápoles contra Italia. Elevó luego esa cuenta a 58 dianas.
En Inglaterra es un ídolo, aunque la gran paradoja es que el 'Príncipe Harry' todavía no pudo conducir al equipo nacional a un gran título internacional.
Fue el máximo goleador del Mundial de Rusia-2018 y el mejor asistente en el Mundial de Catar-2022, donde Inglaterra cayó ante Francia en cuartos de final. Fue en la Eurocopa-2020, jugada en 2021 por la pandemia del covid-19, donde los ingleses rozaron la gloria, pero cayeron en los penales de la final ante Italia en el londinense Wembley.
Kane cuenta con todas las cualidades propias de los goleadores de altísimo nivel: fuerte en el juego aéreo, es un auténtico zorro en el área y no es torpe con el pie izquierdo. Se distingue de los N.9 clásicos por su capacidad para participar en la construcción de las jugadas de ataque. Su visión de juego le convierte en un futbolista muy completo.
El Tottenham, su club formador desde 2004, ha disfrutado de él durante casi dos décadas. Ha estado 17 temporadas en los 'Spurs', donde dio el salto al profesionalismo en enero de 2011.
Es también el máximo goleador de la historia de ese club, con 280 dianas, y el segundo máximo anotador de la historia de la Premier League, con 213 tantos, únicamente superado por los 260 de Alan Shearer. Pero como le ocurre en la selección, no ganó trofeos con el Tottenham, que fue subcampeón de la Premier League en 2017 y de la Liga de Campeones europea en 2019.
Kane podría incluso entrar en la convocatoria para la Supercopa de Alemania, el sábado ante el RB Leipzig. Si se cierra su fichaje por el Bayern antes de ese torneo, podría levantar un primer trofeo con el equipo muniqués 24 horas después de su llegada.
