El Manchester City comienza la defensa de su título de Premier League visitando el viernes a recién ascendido Burnley, en una temporada en la que los hombres de Pep Guardiola tendrán que contener el empuje de un ambicioso grupo de contrincantes que busca arrebatarles el trono.

El Arsenal y el Manchester United han invertido mucho en este mercado para intentar poner fin a sus largas esperas sin el título, mientras que el Liverpool y el Chelsea esperan recuperarse tras una pasada temporada decepcionante.

Pero esta nueva ventana de traspasos marcada otra vez por la gran inversión de los clubes ingleses ha quedado eclipsada por las grandes sumas del campeonato saudita, que ha privado a la Premier League de algunos de sus grandes talentos.

El City sigue siendo el equipo a batir

Los 'Citizens' no sólo han ganado la Premier League en cuatro de las últimas cinco temporadas sino que además el pasado curso completaron el triplete logrando también la FA Cup y la primera Liga de Campeones del club.

Guardiola tendrá como tarea mantener intacta el hambre del equipo, pero el técnico catalán confía en que el City será capaz de lograr convertirse en el primer equipo inglés en ganar la Premier League por cuarta vez consecutiva.

"Lo hicimos en el pasado, ¿Por qué no ahora? Lo que hicimos permanece en nuestros corazones y mentes pero mientras estemos aquí, no podemos parar", dijo Guardiola.

El conjunto 'Sky Blue' ha perdido a su capitán Ilkay Gundogan, que fichó por el FC Barcelona, y a Riyad Mahrez, parte del éxodo de jugadores europeos que han puesto rumbo a Arabia Saudita.

La llegada de los internacionales croatas Josko Gvardiol y Mateo Kovacic ha suavizado la salida de esos jugadores, pero en comparación a otras ventanas de fichajes, el equipo azul de Mánchester ha mantenido un perfil bajo.

Por su parte el Arsenal, segundo clasificado la pasada temporada, ha invertido más de 200 millones de libras (255 millones de dólares) en los fichajes de Declan Rice, Kai Havertz y Jurrien Timber, en un intento por llegar un paso más allá en esta ocasión.

Los 'Gunners' han obtenido ya la primera recompensa a esta inversión al derrotar al City en los penales durante la Community Shield el domingo.

El United mientras se mantiene en un limbo fuera del terreno de juego ya que las conversaciones sobre la venta del club se siguen alargando.

Pero a pesar de esta situación, el entrenador Erik ten Hag ha logrado algunos de sus jugadores deseados con la llegada del portero Andre Onana, el centrocampista Mason Mount y el atacante danés Rasmus Hojlund.

Los 'Red Devils' terminaron terceros y ganaron la Copa de la Liga en la primera temporada de Ten Hag, pero llevan ya una década sin lograr ganar la Premier League.

Argentinos Mac Allister y Pochettino cambian de equipo

Su mayor rival histórico en el campeonato inglés, el Liverpool, no disputará la Liga de Campeones, tras finalizar quinto la pasada temporada.

Los 'Reds' han renovado completamente el centro del campo con las salidas de Jordan Henderson y Fabinho a Arabia Saudita y las llegadas del argentino Alexis Mac Allister (Brighton) y del húngaro Dominik Szoboszlai (RB Leipzig).

En una ventana marcada por los fichajes sauditas, sorprende que el Newcastle, posesión al 80% del fondo soberano saudita, tan sólo se haya reforzado con la llegada del centrocampista italiano Sandro Tonali y del extremo inglés Harvey Barnes, en una temporada en la que regresan a Liga de Campeones.

Voler al 'Top 4' será el objetivo este año del Chelsea, que será entrenado por Mauricio Pochettino. El argentino ha realizado un cambio radical en la plantilla marcado por múltiples salidas, tras una decepcionante temporada en la que los 'Blues' terminaron 12º.

El exequipo de Pochettino, el Tottenham, también estrena entrenador, pero los primeros días de Ange Postecoglou en el banquillo de los Spurs estará condicionado al destino de Harry Kane, estrella del conjunto londinense y pretendido por el Bayern Múnich.

Por detrás, el Aston Villa de Unai Emery o el Brighton de Roberto de Zerbi, que ya brillaron la temporada pasada, podrían volver a dar algún que otro susto a los equipos del 'Top 6' e incluso entrar en la pelea final por puestos europeos.